Es un día como cualquier
otro, vivo feliz de poder estar dónde y con quién yo quiero. Es el mundo ideal
para mi, y estoy convencida de que a cualquiera, le gustaría vivir así. Vivo
con la gente que amo y me hace feliz, por ahí llegan nuevos, pero nadie se va,
nadie me abandona, me traicinona, ni mucho menos, nadie se muere. Estoy en paz
sabiendo que nada malo va a pasar, que puedo salir con mis amigos y estamos
seguros, en cualquiera de todos los sentidos que se le pueda llegar a ocurrir a
alguien.
Me deleito cada día que
pasa con buena música, películas y libros. Pinto con los colores más alegres
con The Beatles de fondo, y todo esto consigue llenarme el alma hasta el rincón
más oscuro y profundo, donde parece imposible llegar.
Vivimos solo el otoño y
la primavera, rodeados de ríos clandestinos, que en sus orillas contienen las
arenas más doradas. El sol es radiante, no hay un solo día que no se deje ver.
Lo curioso de todo esto, es cuando a este sol lo encandila la luz del alma de
la buena gente que me rodea.
Que tengan un muy buen viernes y fin de semana (largo para mi). Nos volvemos a encontrar el lunes para seguir pasando páginas!
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